Hoy, jueves 25 de febrero ha tenido lugar la Conferencia VIP: ''Entender como funciona el cerebro, una pasión y un trabajo'' de la mano de Maite Garolera, Directora de la Unidad de Neuropsicología en el consorcio sanitario de Terrassa.
Maite Garolera empezó hablando de su larga trayectoria profesional; la separó en 6 partes.
La primera: Humanismo
Se basó en la toma de decisiones respecto a qué estudiar. Ella siempre había sentido atracción por las ciencias humanistas, y la conducta de los seres humanos, así que pensó que la docencia era el campo perfecto para aprender los diferentes aspectos que le interesaban y después, devolverlo a la sociedad. Al terminar la carrera decidió que debía seguir estudiando y alimentado sus ganas de conocimiento, y aunque se matriculó y terminó dos carreras: historia y psicología, fue la segunda la que fue su profesión.
Hizo prácticas en psicología clínica y gracias a eso entendió que debía especializarse, porque además le dio una nueva visión de lo que era capaz de hacer:
''Mi visión como humanista era la comprensión del hombre, no el servicio a las personas. Y descubrí que con la Psicología Clínica podía hacer las dos: dar servicio a las personas y descubrir como funcionaba el cerebro''
Algunos sitios donde trabajó y se formó: Hospital Sanitari Sant Joan de Déu, Hospital del Mar, Hospital Clínic, Hospital Universitari Mutua de Terrassa...
La segunda: Voluntad de servicio.
Aquí empezó a liderar la Unidad de Neuropsicología en el Consorci Sanitari de Terrassa.
Para ella, lo más importante en este momento fue la parte Clínica:
''Me focalizo en la voluntad de servir a los otros, y de hacer el mejor diagnostico posible''
A pesar de que la clínica le robaba todo su tiempo, pudo compaginarlo con la docencia en universidades y además con la investigación, ya que consiguió financiación para poder investigar sobre aquello que observa en la clínica y le generaba preguntas
Con todo ello, también terminó su tesis doctoral: ''Alternaciones cognitivas de personas con esquizofrenia al inicio de la enfermedad y el seguimiento al cabo de un año''
La tercera: La ciencia
Maite, con una excedencia, salió del continente y se marchó a Estados Unidos, al National Institutes of Health, en concreto al National Institutes of Mental Health para profundizar en la investigación.
El laboratorio donde se ubicó es especializado en enfermedades mentales graves; un referente a nivel mundial en el estudio de la esquizofrenia.
Allí viví para trabajar e investigar 24 horas al día, 7 días a la semana, durante 4 años
Además Maite publicó diferentes estudios y mantuvo su línea de investigación: ''Estudio de alteraciones cognitivas en personas con el SIDA.
Después de 4 años, volvió a Cataluña, al Consorcio Sanitario de Terrassa y creó un grupo de investigación: Cervell, Cognició i Conducta.
La cuarta: Equipo y creatividad
Decidió, además de seguir manteniendo su actividad, formarse en gestión
Mi idea con el grupo de Investigación es buscar la forma de dar respuestas para entender mejor el funcionamiento del cerebro de determinadas patologías
Maite abrió dos campos nuevos: El interés por la tecnología para mejorar la cognición y la conducta; y el objetivo de intentar entender cuáles son los mecanismos neurobiológicos con personas con obesidad.
Algunos proyectos que llevó a cabo:
Re-memory, Infinity y T'activa
La quinta: Compromiso
En este momento Maite empezó a tener roles de representatividad en sociedades científicas: actualmente es la representante Española en la Federación Europea de Sociedades de Neuropsicología; la Presidenta de la Sociedad Catalana de especialistas en Psicología Clínica y la Presidenta de la Sociedad Catalana de Neuropsicología.
La sexta: Curiosidad
Empieza con el 2020 y está basada en el Covid-19.
Crea el proyecto: Nautilus Covid, que ahora mismo es su pasión, y lo hacen para intentar entender cuáles son los efectos de la Covid-19 en el cerebro.
En esta sexta etapa Maite se detuvo para explicarnos algunos datos sobre el tema:
- Entre un 40 y un 60% de las personas ingresadas en la UCI por la Co-vid, presentan problemas neurológicos: dolor de cabeza, mareos, pérdida de olfato, crisis epilépticas... y esto es lo que hizo pensar que el virus puede atacar al cerebro.
- Sabemos que las personas que han tenido la enfermedad más grave tienen más dificultades o alteraciones cognitivas. Algunas de las alteraciones son: falta de atención, dificultades para organizarse, no encuentran bien las palabras o sienten que el pensamiento va lento.
- Otro dato es que algunas personas que han sufrido la Co-vid19 de forma leve, presentan también alteraciones cognitivas:
La mayoría son mujeres de una media de 40 años y tienen en común, que sufren dificultades para incorporarse a actividades laborales.
Estas alteraciones aparecen con la enfermedad y al terminarla, dejan secuelas. Maite explicó que a esto se le llama Co-vid persistente y representa a un 10% de las personas que han sufrido el virus.
Hay muchas preguntas que no podemos responder, pero sabemos que hay diferentes mecanismos y causas que pueden afectar al cerebro. No sabemos cuáles son estos mecanismos y en quienes puede aparecer, ni tampoco cuál es la puerta de entrada del virus en nuestro cerebro.
Mujeres y neurociencia:
Maite, quiso enfocar la última parte de su charla a hablarnos del sesgo de género en las ciencias.
Nos cuenta que a raíz del 11 de febrero de este año, el día internacional de la mujer y la niña en la ciencia, han aparecido muchos estudios. En Cataluña, por ejemplo: hay más mujeres que hombres que están haciendo la tesis doctoral, pero a medida que va subiendo el escalafón jerárquico de responsabilidad, se dispara la brecha de género
Más de un 70% de hombres ocupan puestos de liderazgo en relación a las mujeres que quedamos en menos de un 30%
A nivel nacional, se muestra exactamente la misma idea, el sesgo de género a medida que la responsabilidad aumenta: un 75% hombres vs 25% de mujeres
La dificultad de liderazgo de la mujer en la ciencia se produce en todos los campos, evidentemente hay campos que más y otros que menos. En el mío, el de las ciencias de la salud, hay un 28% mujeres vs 72% hombres
Este sesgo, cuenta Maite, se produce también a nivel Europeo: liderando equipo, proyectos, investigaciones. Y además recuerda que hay muy pocas mujeres que consiguen grandes premios dentro de la ciencia.
''En estos momentos sigue habiendo una distancia en la ciencia, que yo estoy segura que acabará, pienso que es un accidente temporal, es algo que se produce por unas circunstancias que variaran y cambiaran''.
''Cada vez hay más mujeres en el mundo de la ciencia, pero cuando llegamos a posiciones de liderazgo hay una parte de techo de cristal, que estoy segura que romperemos''.
Maite quiso acabar, resumiendo lo que ha sido para ella su carrera profesional, y dejando claro que la vocación, las ganas de aprender y de querer pasarlo bien, y sobre todo la perseverancia han sido pilares fundamentales.
''Construimos nuestras carreras a partir de fases y de elementos, pero en realidad siempre mantenemos una unidad cromática. En mi caso, siempre ha sido; la curiosidad, lo importante que son para mi las personas y la capacidad de poder ayudar a través del método científico, sin dejar de lado la docencia''.